Clamor de una cinéfila aficionada.

(10/04/2012)

Pasó Semana Santa y yo sin ir a misa escribir entrada alguna en un buen tiempo. Me disculpo por ello, ello siendo lo segundo y espero que hayáis pasado unas buenas y felices vacaciones, fo realz. 

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Mi padre por alguna razón (calentamiento global, la respuesta a todas las preguntas habidas y por haber) ha estado comprado todo tipo de parapeto que se le venga en gana para convertir nuestra sala en un triste intento de mini sala de cine, incluso tenemos la pantalla plana, equipo de sonido de calidad playitera y BLU-RAY (no me preguntéis de dónde saca el dinero porque YO tampoco sé... ¿calentamiento glo-? 5 de Julio, lo debe sacar de 5 de Julio), sólo nos faltan los asientos y el asistonto (aunque creo que ese papel lo cumplo yo...). 

Ya os hacéis una idea de qué estuve haciendo en todo mi tiempo libre... (pista: ver películas, jugar videojuegos, ver películas, ver anime, ver películas). Así que he decidido hacer una pequeña lista de recomendaciones. De películas de hace casi cien años hasta alguna que creo que no debería de haber salido en DVD aún pero que a pesar de ello tengo...

Del fail venimos y al fail iremos.

Como llevo desaparecida desde hace poco más de un mes, decidí volver con alguna chorrada que no se me ha ocurrido aún.

Ya va, denme un minuto... Piensa, Pinky, piensa.

¡Ah! ¿Alguna vez habéis pensado en cómo vais a morir? Dejando de lado las tonterías cortavenas, por amor a los tacos.

¡TACOS!

Es algo que he estado pensando desde hace veinte segundos y me parece algo de lo que es necesario hablar si ya se han agotado todos los temas de conversación, se está demasiado aburrido y/o se quiere espantar a alguien para que nunca te vuelva a hablar. Y gracias a ello he imaginado la única forma en la que podría morir en éste y todos los mundos.

Atropellando un carro estacionado.