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He visto incontables blogs hechos con el simple y llano fin de mostrar manualidades (ya sea para vender o no), algunas increíbles y otras simplemente curiosas, y se me ocurrió hacer una entrada más o menos parecida.
Luego de una espera más larga de lo que yo hubiese querido, me llegó mi Kindle e inmediatamente le subí tanto libro pude. Pero éso es lo de menos. No tenía suficiente para un forro, así que decidí hacerle uno casero. Cómo no, siendo yo, las cosas no terminaron de la mejor manera...
Al menos no para este pobre libro inocente, víctima de mis tontas ocurrencias.
Ya no puedo decir que ningún libro fue herido durante la producción de esta entrada...
No esperéis que os de las mejores instrucciones pues me parece que lo mejor es ir inventado poco a poco e ir adivinando qué hay que hacer y cómo hay que hacerlo, aún así, daré mi mejor intento (lo que no es decir mucho).
Manos a la obra, entonces.
Si queréis seguir mis pasos, los primeros materiales que necesitaréis son:
(De izquierda a derecha):
*Materia con el que forrarlo (en mi caso, tela de jean/vaquero/como le llaméis).
*Un libro al que no se le tenga mucho aprecio para cortar sus páginas en pedazos.
*Lo que sea que se vaya a esconder en el libro (en mi caso, de nuevo, mi Kindle).
*Un exacto.
*Cola blanca/pegamento.
Primero, tomen las medidas de lo que sea que vayan a esconder y escribanlas en la primera hoja del libro, que está usualmente en blanco o con casi nada impreso, luego, procedan a cortar con el exacto. Deberían de quedarles dos cosas, el desastre de la primera imagen y algo como ésto:
Ah, libros, cuenta la leyenda que se leía en ellos.
-¡Un momento, Sandra! ¡Ése no es el libro de la segunda foto!
No, no lo es. El libro machacado aquí presente es Juegos escénicos para jóvenes, recopilados por Emilio Carballido, y el de la segunda imagen es El gran laberinto, de Fernando Savater. ¿Por qué el cambio? Iba a usar El gran laberinto en un principio, cuando tomé la foto, pero le tengo cariño a ese libro y poco después me tropecé con la recopilación de Carballido, la cual poseo a causa del colegio y nada más, y me fijé que tenía mejor tamaño para lo que quería hacer.
Continuando, así se ve con el Kindle dentro:
Luego, para que quede fijo el libro, vais a tener que pegar las páginas... Una por una. O podréis haceros los locos, embarraros la mano en pegamento y pegar las páginas por los bordes (como hice yo) o con cinta adhesiva. Igual, eso debería terminar cubierto por lo que sea que vayáis a usar como envoltorio.
Ahora sólo os queda decorar el libro. Aquí tenéis un aproximado de lo que me quedaría a mí...
O Rly, NO y el emblema de Hufflepuff. |
... con memes (y otros) colados.
Sólo forré el libro superficialmente, la tela de jean (junto con las chapas) no está pegada, para ello necesito silicona caliente... cosa que no tengo ahorita.
*PROXIMAMENTE*
Como aún no he acabado este pequeño proyecto, la entrada está, técnicamente, incompleta. Se añadirán los resultados tan pronto como pueda.
Buenisima idea!
ResponderEliminartraetelo a mi casa y yo te presto silicona caliente.
ResponderEliminarProblema resuelto.
Quien dijo que los libros eran solo para leer
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