sábado, 15 de enero de 2011

Sin historia no hay maldad.

¿No os habéis dado cuenta de que la mayoría de los malos últimamente tienen un pasado doloroso y triste que los trauma de por vida, ay, qué dolor whatsoever?

Y no son sólo ellos, son casi todos los personajes en general. En especial en "Naruto".

Todos o tienen un pasado triste/significativo/no-feliz o no son la gran cosa. Y no me vengan con que Sakura no tuvo un pasado triste, porque se la pasaba llorando (y no precisamente de la risa) por su frentesota... así que yo no llamaría a eso feliz. Ajá, llega Ino, se hacen Best Frienzd 4 Evah! y todo va la mar de guay, hasta que llega Sasuke y... el resto es historia.

Si bien los pasados tristes pueden ser un buen recurso, abusar de ello es un gran error, al menos a mí parecer. Encima está el hecho de que la gran mayoría son exáctamente lo mismo. Y eso me A-BU-RRE.

¿Y si yo quiero ser mala por que sí? ¡Pues lo soy! Punto. Ahora, si me disculpan, voy a cargarme al héroe de turno.

Por cierto, acabo de recordar a dos villanas que recuerdo con cariño. Ninguna tenía pasado triste, eran egoístas y aún así las adoro. Cruella de Vil (101 dálmatas) y Gothel (Enredados). Las dos eran personajes tan interesantes, en especial Gothel, y ¿qué pasó? Muertas. Ambas.
Si bien entiendo que Cruella haya perdido (si se hubiera hecho el abrigo de cachorro, lloro, ¡son inocentes cachorritos!) esperaba que Gothel ganara. Pero claro, es Disney y el bien siempre triunfa sobre el mal.

Aún así mi villano favorito es y siempre será Hannibal Lecter, ese hombre es... simplemente increíble (Anthony Hopkins FTW!).

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